Que es el storytelling y para qué sirve

Es posible que no te suene de nada. No te preocupes, es totalmente normal. Por ello, te presentamos este artículo en el que te contaremos una gran estrategia para generar sensaciones más positivas, humanizando un poco más a las marcas. 

La traducción literal de storytelling significa contar historias. Aunque de primeras no parece que tenga ninguna relación con el ámbito empresarial, y en particular del marketing de contenidos, es un término que va muy relacionado con él. 

El storytelling es la técnica que gestiona los discursos a partir del uso y el dominio de la narración. Es decir, se crea un planteamiento, un nudo y un desenlace para que se entienda un poco más la explicación. Aun así, hay expertos que recomiendan un par de pasos más, quedando así de la siguiente manera: comienzo (situación inicial), entramado (aparece el problema); aparece el héroe, final y moraleja.

Su objetivo es transmitir valores o ideas a través de una historia. Va más allá de vender un producto, vende también las emociones o los sentimientos que conectan al consumidor con la marca. Es de esta manera como permite que el consumidor se sienta como el protagonista de la historia, ya que el mensaje contiene un significado que puede ser aplicado al día a día de cada persona. 

Para qué sirve el storytelling

Podríamos decir que sirve básicamente para tres cosas:

  1. Producen una idea positiva del protagonista de la historia en valores que se relacionan con la empresa, el servicio o el producto que se quiere vender.
  2. Logra un vínculo con el receptor para que este recuerde un poco más por mensaje y sea más fiel a la marca.
  3. Impulsar al consumidor del mensaje que efectúe alguna actividad en concreto, que quizá una venta en un tiempo posterior.

Qué incluye la táctica del Storytelling

Como ya hemos comentado, el storytelling debe estar formado por un inicio, un nudo y un desenlace, aunque recomendamos que sean cinco puntos distintos. De esta manera te aseguramos que conseguirás captar la atención del cliente con tan solo una historia bien expuesta.

  • Presentación: el inicio, se conoce la situación y los personajes. Se da el punto de vista que necesita la historia para convencer al espectador (el cliente).
  • Entramado: aparece el problema y se intenta solucionarlo aunque, evidentemente, no se consigue.
  • Héroe: aparece un nuevo factor que comienza a solucionar todos los problemas que antes no se habían resuelto. Va totalmente relacionado con la marca.
  • Final: por lo general, el final acostumbra a ser feliz. Se trata de qué quiere dar a entender la marca respecto el producto o el servicio. 
  • Moraleja: aquí está el verdadero final donde se conoce por qué el héroe ha tenido éxito (o no).

Lo más importante del storytelling es narrar bien la historia, por lo que hace que nos tengamos que centrar un poco más en el área cercana al arte. No es sencillo hacer un buen contenido que llegue a la audiencia, ya que supone invertir más de lo que parece y hace falta que llame la atención al espectador. 

Como en todo, las buenas historias son las que perduran en la mente de la audiencia, y estas son las que deben hacerse virales. 

 

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