Qué es la economía circular
¿Alguna vez has oído hablar de la economía circular? Se trata de un sistema de producción y consumo que se basa en reutilizar, renovar, reparar y reciclar materiales o productos ya existentes para aprovecharlos las veces que sea posible. De esta manera el ciclo de vida de los productos es más largo y se reducen los residuos al mínimo.
Desde hace décadas el planeta está sufriendo un grave problema de contaminación que ha ido en aumento al no poner nuestro granito de arroz para erradicarlo. Para el bien común, es necesario encontrar soluciones que incrementen la sostenibilidad y cuiden del medio ambiente.
Beneficios de la economía circular
Su gran ventaja es la rentabilidad, ya que es así como se aprovechan al máximo los materiales, además de ahorrar un dinero considerable a las grandes empresas. Asimismo, también se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, responsables de un 45% de las emisiones de CO₂.
Avanzar hacia una economía más circular generaría beneficios como la reducción de la presión sobre el medioambiente, pero también el crecimiento económico (0,5% adicional del PIB) y el empleo, con un crecimiento de hasta 700.000 trabajos solo en la Unión Europea en el año 2030.
Generación de empleos
La aplicación de este sistema generaría, solamente a España, 160.000 puestos de trabajo para negocios sostenibles antes del 2030. Este dato proviene gracias a que las pequeñas y medianas empresas se caracterizan cada vez más por utilizar materias primas recicladas en el proceso de producción.
Se destaca de manera positiva el sector de la hostelería, ya que son el que las empresas ponen más en marcha iniciativas basadas en reducir los residuos. Además, también se trata de ser el sector más interesado en formar a sus empleados y solicitar a los proveedores certificados ambientales.
Ejemplos de la economía circular
Durante el proceso de diseño también se tiene que pensar cómo se usará cada pieza cuando llegue al fin del producto. Se trata de prevenir el daño de la mejor manera posible. Aquí es donde coge protagonismo la economía circular. Te presentamos unos ejemplos básicos que cada vez son más conocidos:
- Neumáticos para zapatos: hay muchas empresas que se dedican a fabricar zapatos ecológicos y veganos sin utilizar pieles ni tóxicos, pero sí materiales como neumáticos.
- Construcción sostenible: cada vez más casas y oficinas son ideadas para tener una larga durabilidad. Es el caso de una empresa holandesa que construye viviendas a partir de módulos de madera fresados para que duren toda la vida.
- Ciudades con materiales reciclados: los separadores del carril bici son hechos con residuos de plástico derivados del consumo. De esta manera, no solamente se apuesta por el reciclaje, sino que también por vivir en ciudades más sostenibles.
- Packaging sostenible: los embalajes y los envases forman parte de nuestra utilidad diaria. Por ello, el packaging sostenible se basa en crear productos como tuppers o cajitas de cartón reciclables de más de un uso.
Por qué seguir una economía circular
Como ya has visto, todo son ventajas y provechos, por lo que nada de la economía circular supone un inconveniente. Es evidente que hay que cuidar del planeta de la mejor manera posible, y escoger seguir una economía circular significa escoger una de las mejores opciones para combatir con la contaminación. ¿A qué esperas para ponerlo en marcha?
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